Los Jardines del Alcázar ocupan parte de los terrenos donde se encontraban situadas las primitivas Huertas del Alcázar, zonas de cultivo que, tras diferentes modificaciones a lo largo de la historia, han dado lugar a los extraordinarios treinta mil m² aproximados de los jardines actuales.
Las
Huertas del Alcázar quedaban limitadas al Noroeste por el Arroyo del Moro, al Sur por las murallas del Alcázar, fronteras al Guadalquivir, las Caballerizas Reales al Norte y el propio Alcázar y se abastecían, a través de diferentes conducciones, por las aguas procedentes del río Guadalquivir y de la Sierra de Córdoba.
Los actuales
Jardines del Alcázar, configurados a mediados del siglo XX, están conformados por una serie de terrazas y jardines en diferentes niveles con estanques, albercas y especies autóctonas de las más variadas: palmeras, cipreses, naranjos y limoneros se alternan con fuentes y estanques creando un espacio único y representeativo de la cultura cordobesa.
Los jardines tienen un paseo, delimitado por cipreses recortados, donde se intercalan esculturas de los Reyes que han pasado por el
Alcázar, entre las que destaca la que rememora la reunión mantenida entre los Reyes Católicos, Isabel y Fernando, con Cristóbal Colón.
De este modo el Jardín queda configurado en diferentes zonas a diferentes alturas, entre las que destacan:
Jardín Alto,
Jardín Medio,
Jardín Bajo,
Paseo de los Reyes y
Patio Morisco.
Cabe destacar que los
Jardines del Alcázar están protegidos por el P.G.O.U. de 1986 con categoría 2B. M.V.C. y que junto al
Alcázar, clasificado como Monumento Histórico, el 4 de Junio de 1931, integran una zona declarada por la UNESCO en 1994 como
Patrimonio de la Humanidad.